17/11/15

Saberse humano


Sol mañanero de otoño, sales tímido y escaso. Qué gran fortaleza acarreas, dándo un nuevo reto, una perspectiva renovada. Autonomía de la realidad. Saber que se ha dado todo, hasta la última gota de sudor y del alma, con sus demonios y virtudes. Fortaleza y profundidad del ser humano.

¡Qué más humano que eso! Entrega sin condiciones y vaciamiento del ser. Qué más bonito que eso.

Tranquilidad.

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