A cumplirse 20 años de apertura de la Facultad de Ciencias Sociales en la UBA, los estudiantes asistimos a las cursadas en edificios que se encuentran en condiciones derrumbables.
Ante ello, la lucha por unir las 7 sedes de Sociales en un edificio único fue la que se llevó a cabo en la segunda mitad de 2008. Los resultados no fueron en infraestructura, sino más allá.
Para contextualizarte:
Video 1: http://www.youtube.com/watch?v=h5HyKUgff4Y
Video 2: http://www.youtube.com/watch?v=h1R9dRKVTS0
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Buenos Aires, 5 de Septiembre Comunicado de prensa de la asamblea de estudiantes de Ciencias Sociales (UBA) - Sede Ramos Mejia
Los estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales durante el día de ayer en las tres sedes realizamos clases públicas y diversas actividades culturales junto a docentes. Las cuales
culminaron en asambleas donde refrendamos mantener la toma de las tres sedes por tercer día consecutivo exigiendo respuestas a la crisis edilicia y el ahogo presupuestario al que nos vemos sometidos día a día, frente al silencio del decanato, el rectorado y el gobierno nacional. Somos concientes que esta situación no es particular de la Facultad de Ciencias Sociales sino que es la educación pública en su totalidad la que está sufriendo los embates del desfinanciamiento. Como lo ha demostrado la lucha de los estudiantes secundarios frente al recorte de becas por parte del gobierno de la ciudad de Buenos Aires y el reclamo de los docentes en t
odo el país. Como venimos denunciando, nos vemos obligados a cursar divididos en tres sedes, hacinados en aulas sin ventilación, tomando apuntes en el piso, sin plan de evacuación ni luces de emergencias, baños en estados desastrosos, docentes cobrando por debajo de la canasta básica y miles trabajando ad honorem. A causa de esta situación el jueves 28/08 se produjo un desprendimiento de una estructura metálica en un baño de la sede de Marcelo T. de Alvear que golpeó a una compañera. A fines del cuatrimestre pasado hubo un corte de luz en la misma sede evidenciando la falta de luces de emergencia; en Ramos Mejía, en 2005 se incendió el tablero de electricidad y posteriormente en el 2006 se cayó un escalón de cemento. Para evitar que esto pase a mayores, los estudiantes reunidos en asamblea exigimos: Aumento de presupuesto para la educación. Renta para los miles de ad 
honorem y salario mínimo equivalente a la canasta familiar. Reanudación inmediata con plazos concretos de las obras del edificio único de Constitución. Mejora de la infraestructura y seguridad de las sedes de Marcelo T. de Alvear, Ramos Mejía y Constitución: gas, luces de emergencia, matafuegos, mangueras hidrantes, arreglo de aulas y baños. En tanto cientistas sociales exigimos el retiro de la intervención del INDEC. Fondos para la educación, no para el Club de París ni para las patronales del campo. Convocamos: - A clases públicas y actividades culturales en las tres sedes de la Facultad durante todo el dia de hoy. -A la asamblea conjunta de las tres sedes que se realizará hoy en la sede de Ramos Mejía a las 19hs.
Los estudiantes de la Facultad de Ciencias Sociales durante el día de ayer en las tres sedes realizamos clases públicas y diversas actividades culturales junto a docentes. Las cuales
culminaron en asambleas donde refrendamos mantener la toma de las tres sedes por tercer día consecutivo exigiendo respuestas a la crisis edilicia y el ahogo presupuestario al que nos vemos sometidos día a día, frente al silencio del decanato, el rectorado y el gobierno nacional. Somos concientes que esta situación no es particular de la Facultad de Ciencias Sociales sino que es la educación pública en su totalidad la que está sufriendo los embates del desfinanciamiento. Como lo ha demostrado la lucha de los estudiantes secundarios frente al recorte de becas por parte del gobierno de la ciudad de Buenos Aires y el reclamo de los docentes en t
odo el país. Como venimos denunciando, nos vemos obligados a cursar divididos en tres sedes, hacinados en aulas sin ventilación, tomando apuntes en el piso, sin plan de evacuación ni luces de emergencias, baños en estados desastrosos, docentes cobrando por debajo de la canasta básica y miles trabajando ad honorem. A causa de esta situación el jueves 28/08 se produjo un desprendimiento de una estructura metálica en un baño de la sede de Marcelo T. de Alvear que golpeó a una compañera. A fines del cuatrimestre pasado hubo un corte de luz en la misma sede evidenciando la falta de luces de emergencia; en Ramos Mejía, en 2005 se incendió el tablero de electricidad y posteriormente en el 2006 se cayó un escalón de cemento. Para evitar que esto pase a mayores, los estudiantes reunidos en asamblea exigimos: Aumento de presupuesto para la educación. Renta para los miles de ad 
honorem y salario mínimo equivalente a la canasta familiar. Reanudación inmediata con plazos concretos de las obras del edificio único de Constitución. Mejora de la infraestructura y seguridad de las sedes de Marcelo T. de Alvear, Ramos Mejía y Constitución: gas, luces de emergencia, matafuegos, mangueras hidrantes, arreglo de aulas y baños. En tanto cientistas sociales exigimos el retiro de la intervención del INDEC. Fondos para la educación, no para el Club de París ni para las patronales del campo. Convocamos: - A clases públicas y actividades culturales en las tres sedes de la Facultad durante todo el dia de hoy. -A la asamblea conjunta de las tres sedes que se realizará hoy en la sede de Ramos Mejía a las 19hs.
jueves 11 de septiembre de 2008
Hoy 20hs
-ASAMBLEA GENERAL DE SOCIALES-
En la sede Constitución (Santiago del Estero 1029)
Acercate a participar y proponé cómo seguimos con nuestra lucha
Durante todo el día, además, se realizarán clases públicas en las tres sedes de la Facultad
Defendamos la Educación Pública
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En la sede Constitución (Santiago del Estero 1029)
Acercate a participar y proponé cómo seguimos con nuestra lucha
Durante todo el día, además, se realizarán clases públicas en las tres sedes de la Facultad
Defendamos la Educación Pública
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viernes 3 de octubre de 2008
Carta abierta a los estudiantes de Ciencias Sociales de la UBA
Como estudiantes de nuestra facultad conocemos los estragos de la etapa neoliberal en nuestra sociedad, desde la
sangrienta dictadura militar, pasando por los decadentes noventas y con persistencia (debates al margen) hasta nuestros días. ¿Pero cuánto conocemos de su injerencia en nuestro propio ámbito de estudio? ¿Cuánto sabemos sobre la Ley de Educación Superior, por ejemplo? Estudiamos a los movimientos sociales, al sindicalismo, al movimiento piquetero, a los partidos políticos, ¿pero cuánto debatimos sobre el movimiento estudiantil?
sangrienta dictadura militar, pasando por los decadentes noventas y con persistencia (debates al margen) hasta nuestros días. ¿Pero cuánto conocemos de su injerencia en nuestro propio ámbito de estudio? ¿Cuánto sabemos sobre la Ley de Educación Superior, por ejemplo? Estudiamos a los movimientos sociales, al sindicalismo, al movimiento piquetero, a los partidos políticos, ¿pero cuánto debatimos sobre el movimiento estudiantil? Sabemos que el presupuesto es bajo. Experimentamos las precarias condiciones de cursada, conocemos personalmente a los ayudantes ad honorem. Pero sin embargo, hemos naturalizado estas condiciones. ¿No sería distinto que todas las carreras de la facultad se cursen en un mismo edificio? ¿No se enriquecerían nuestras visiones con una interdisciplinariedad si estudiantes de todas las carreras nos cruzáramos en pasillos, halles, bares y bibliotecas adecuadas? Intentamos conocer, problematizar y criticar distintos aspectos de nuestra sociedad y el mundo, ¿pero lo hacemos seriamente con nuestra facultad, con nuestras carreras, con nuestras clases? ¿Qué estudiamos e investigamos, cómo, por qué, para qué y para quién? Estas son preguntas sobre las que podemos reflexionar individualmente, pero sobre las que sólo colectivamente podremos construir una respuesta alternativa. 
Hay quienes piensan que las organizaciones militantes de nuestra facultad no realizan una política constructiva. Al margen de la generalización y prejuicio que esto conlleva y con todo de lo que pueda tener de cierto, esa visión lo ubica a uno como un individuo-consumidor pasivo a la espera de una oferta atractiva del mercado político. Como cada año, septiembre es un mes de movilizaciones educativas en general y universitarias en particular (el 16 de septiembre es el aniversario de la Noche de los Lápices y el mes en que el Poder Ejecutivo suele enviar el proyecto de Presupuesto Nacional para el año siguiente al Congreso). Los estudiantes y docentes más
movilizados buscan con marchas y otras medidas conseguir mayor presupuesto, aumentos salariales y obtención de salarios para quienes regalan su fuerza de trabajo. Pero tales medidas tienen un techo y sólo obtendrán los incrementos que le pelean a la inflación mientras haya desinterés desde la mayoría de la propia universidad. Por otro lado, si mañana contáramos con un edificio en excelentes condiciones y buenos salarios para todos los docentes, ¿en qué cambiaría el contenido de las materias, la forma de las clases, el interés de estudiantes y profesores, el sentido de las investigaciones? Importa el lugar de la universidad y de nuestra facultad e
n la sociedad (y por tanto, en parte, de nosotros mismos), y acaso allí debiéramos empezar a buscar las razones del magro presupuesto. La universidad no está “insertada” en la sociedad, es parte de la sociedad, la atraviesa en su conjunto. Si queremos interpretar nuestra sociedad, entonces no nos olvidemos de la universidad. Y de transformarla, claro. Aprovechemos los espacios ya creados como las comisiones, las asambleas, las charlas, las marchas, los p
artidos, las organizaciones, el centro de estudiantes, pero también las clases, y, por qué no, armemos otros. Convocamos a todos los estudiantes interesados en discutir estos (y otros) temas a un debate abierto, democrático, crítico y propositivo, el jueves 9 de octubre a las 20:30 en la sede de M. T. de Alvear (aula 405 como punto de encuentro).
Hay quienes piensan que las organizaciones militantes de nuestra facultad no realizan una política constructiva. Al margen de la generalización y prejuicio que esto conlleva y con todo de lo que pueda tener de cierto, esa visión lo ubica a uno como un individuo-consumidor pasivo a la espera de una oferta atractiva del mercado político. Como cada año, septiembre es un mes de movilizaciones educativas en general y universitarias en particular (el 16 de septiembre es el aniversario de la Noche de los Lápices y el mes en que el Poder Ejecutivo suele enviar el proyecto de Presupuesto Nacional para el año siguiente al Congreso). Los estudiantes y docentes más
movilizados buscan con marchas y otras medidas conseguir mayor presupuesto, aumentos salariales y obtención de salarios para quienes regalan su fuerza de trabajo. Pero tales medidas tienen un techo y sólo obtendrán los incrementos que le pelean a la inflación mientras haya desinterés desde la mayoría de la propia universidad. Por otro lado, si mañana contáramos con un edificio en excelentes condiciones y buenos salarios para todos los docentes, ¿en qué cambiaría el contenido de las materias, la forma de las clases, el interés de estudiantes y profesores, el sentido de las investigaciones? Importa el lugar de la universidad y de nuestra facultad e
n la sociedad (y por tanto, en parte, de nosotros mismos), y acaso allí debiéramos empezar a buscar las razones del magro presupuesto. La universidad no está “insertada” en la sociedad, es parte de la sociedad, la atraviesa en su conjunto. Si queremos interpretar nuestra sociedad, entonces no nos olvidemos de la universidad. Y de transformarla, claro. Aprovechemos los espacios ya creados como las comisiones, las asambleas, las charlas, las marchas, los p
artidos, las organizaciones, el centro de estudiantes, pero también las clases, y, por qué no, armemos otros. Convocamos a todos los estudiantes interesados en discutir estos (y otros) temas a un debate abierto, democrático, crítico y propositivo, el jueves 9 de octubre a las 20:30 en la sede de M. T. de Alvear (aula 405 como punto de encuentro). Comisión de Movimiento estudiantil
Martes 18:00 en Ramos en la entrada de Franklin o en el bar La Barbarie.
informacion_y_difusion@gruposyahoo.com.ar
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