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Un poeta murió, la realidad se nos cayó.
Uruguayo Mario, Benedetti de apellido.
¿Dónde estás? ¿Dónde estás cuando austeros nos quedamos?
La Latinoamerica revolucionara te necesita.
La literatura te recuerda, la poesía te posee.
Benedetti murió. Una enfermedad se lo llevó.
Ahora navega en el Río de la Plata, junto a aquellos
fascinadores, magos, ilusionistas, barqueros.
Vos, tú, Mario, revolucionario.Te recordaremos. En la memoria quedarán las largas lecturas de tus centenares de poemas.
Mar del Plata, caminos empolvados, calles vacías, música en los árboles, rock brasileiro.
Vos fuiste andamio literario para nosotros.
El exilio te llevó y la poesía te regresó.
Abrazado poeta, simplificado escritor.
El melodrama de la escritura se modifica cuando un poeta tan grande como Mario Benedetti deja de existir.
No es la lástima, no es la miseria, no es la extrañeza.
Es tan sólo la lectura. Poeta de varios rostros, poeta ultimado, poeta repatriado.
De a dos, tenemos la exigencia por recrearte, modificarte, antropófagos.
Haremos, contigo, un inventario de a dos.
.
La soledad es nuestra propiedad más privada
viejo rito de fuegos malabares
en ella nos movemos e inventamos paredes
con espejos de los que siempre huimos.
la soledad es tiempo / veloz y detenido /
reflexiones de noria / espirales de humo /
con amores in vitro / desamores in pectore /
y repaso metódico de la buena lujuria
Fragmento de LAS SOLEDADES DE BABEL (1991)
.
Maestro de las palabras, oriental de las ideas. Benedetti de las construcciones. Imaginario de lo último de los 70. Hermano reconstructor de la vigencia de la lucha por la emancipación. Tus versos añorados son ya, por juventudes aún no nacidas, cátedras de literatura.
.
1.
Ayer fue yesterday
para buenos colonos
mas por fortuna nuestro
mañana no es tomorrow
2.
Tengo un mañana que es mío
y un mañana que es de todos
el mío acaba mañana
pero sobrevive el otro
DIGAMOS (1987)
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